jueves, 21 de noviembre de 2013

Fueron ellos; yo no.

"Those kids in Tahrir Square, they were not motivated by any religion or ideology. They were motivated by what they saw through this interconnected world, and they wanted a piece of the opportunity and a chance to get an education and have a job and have a future; one single-most organized entity in the state that stole the revolution, the Brotherhood." Palabras de John Kerry.

En todas las revueltas y guerras norteafricanas vieron los Estados Unidos la oportunidad de manejar y controlar a su antojo no solo los intereses propios, sino el destino de Túnez, Egipto y Libya. Desde el primer momento tanto en la tunecina como en la egipcia estuvieron dando y sumando apoyos internacionales para los Hermanos Musulmanes y junto con el apoyo explícito de Turquía -único país musulmán democrático, aunque con la democracia venida a menos- los presentaron y los vendieron como una oportunidad única e histórica para asentar al Islam político y como la vía de la construcción de la democracia en los países musulmanes tradicionalmente gobernados por dictadores.

La apuesta norteamericana en su apoyo a la hermandad se puede ver fracasada pues tanto en Egipto como en Túnez han sido quitados de enmedio con apenas un año de mandato y, como en 2010 y 2011, otra vez con la gente en la calle gritando contra el dictador y pidiendo casi lo mismo: libertad, pan y derechos a los que se suma la lucha contra el terrorismo del que los hermanos han sido gemelos.

En el caso libio la CIA, junto con saudíes, qataríes y turcos, estuvo de parte de los sublevados que buscaban la libertad sobre la opresión de Qaddafi sobre su pueblo(¿?) y el cambio a la democracia (¿?); misma justificación totalmente válida para siria pues en ambos casos se pusieron a la faena armadas de diversos países destruyendo Libya -hoy sin viso alguno de estabilidad- y camino iban de hacerlo con Syria hasta que se toparon con Putin y recularon los planes de ataque, para monumental cabreo saudí.

Y por qué ahora las palabras de Kerry? Porque EE.UU. o se ha pasado de chulo con Egipto o le ha infravalorado y la respuesta egipcia ha sido mirar para Rusia y China después de que Obama congelara la ayuda económica al ejército y la entrega de aviones de combate, helicópteros, misiles y las maniobras conjuntas bienales que Egipto debería haber recibido y participado, y los acuerdos que el gobierno interino egipcio ha logrado para el país durante su visita a Moscú, ya devuelta por los rusos en Cairo, suponen armamento, colaboración en la planta nuclear de Dabaa y una más que probable base naval rusa muy cerquita de la entrada/salida del Canal de Suez -Alejandría, Damietta o Port Said-, la primera rusa fuera de su territorio pues la de Tartous en Syria corresponde a los tiempos de la URSS. 

Con esa probable base naval rusa y con Cairo haciendo ojitos a Moscú no le queda más remedio a EE.UU. que negar la mayor y culpar directamente de lo ocurrido a los casi extintos Hermanos Musulmanes para intentar una nueva aproximación a Egipto y una normalización de sus relaciones y acuerdos; más ahora con la frustración saudí de ver cómo después de inyectarle dinero después de la caída de los HH.MM. Egipto gira hacia Rusia, principal aliado de todo aquello que el príncipe Bandar quisiera devastar: Hizballah, Syria e Iran. Pero me temo que las palabras estadounidenses, después de haber ayudado a los HH.MM., de haberles defendido internacionalmente y después de haber condenado repetidamente el 30-J como Golpe de Estado, han llegado muy tarde.


PD: Al mismo tiempo que se filtra que la próxima Constitución garantizará a las SCAF elegir libremente su Ministro de Defensa se publica que al-Sisi no descarta presentarse a la elecciones presidenciales, según las palabras del propio General. Esto demuestra lo poco que vale en este país la palabra dada y el compromiso adquirido. 

martes, 12 de noviembre de 2013

Idiotizados o directamente idiotas?.

Coincidiendo con la Ashura algunos elementos se enzarzan en absurdas discusiones sobre quién es más puro y representativo en el Islam: si los sunníes por ser mayoría o si los shiíes porque los sunníes son una escisión de ellos. Para los sunníes la Ashura no es más que un día de ayuno obligatorio siendo el anterior o el posterior también recomendable porque así es como lo hacía Muhammad. Para los shiíes es un recuerdo al asesinato del Imam Husayn, nieto de Muhammad, junto a 72 seguidores en la batalla de Kerbala en 680.

Al mismo tiempo que aparecen las irritantes imágenes del rito shií de personas fustigándose hasta sangrar los sunníes se fortalecen diciendo que eso no es Islam, que ningún escrito recoge la autolesión sino todo lo contrario; la penalizan, que los shiíes son unos desviados o una secta que dicen ser musulmanes pero que no lo son. Tal vez los que así opinen, a los sunníes me refiero, no se están dando cuenta que están en el punto -o en el camino- que otros quieren y por el que han destinado, y están destinando, mucho dinero y esfuerzos.

Hay muchas maneras de idiotizar a la población pero la más efectiva es el medio audiovisual. En España, por ejemplo, no hay nada mejor que Sávame para hacer crecer como hongos a ridículos freaks mientras la audiencia se los come durante horas y comentan las ocurrencias al día siguiente -eso si no se lo están contando al vecino o al amigo por teléfono al mismo tiempo. En el caso musulmán los ricos y poderosos países del Golfo capitalizan la parabólica y entre los canales hay incontables dedicados permanentemente al Islam; predicadores moderados y predicadores radicales -que son los que más audiencia tienen- al servicio de una causa: la oración, la divulgación y, al mismo tiempo que inyectan una dosis diaria de intolerancia, la radicalización.

El mayor consumo de este tipo de "entretenimiento" lo hace, generalmente, la población de menos recursos y de menos estudios; los que la vida no les ha dado prácticamente nada y poco tienen más que la religión para agarrarse a algo. Son el caladero y el batallón de mártires que los poderosos puede que necesiten llegado el momento.

Ahora se sigue viendo, día tras día, que la Guerra Civil de Syria es un intento de dominación de Saudi Arabia sobre toda la región. Se sigue viendo que Saudi Arabia, aliándose con Israel gracias a Bandar, lo que quiere es someter a Iran y, como fichas de dominó cayendo, a todos los países de profesión shií. Y ahora se sabe que Saudi Arabia tiene planes de conseguir la bomba atómica con ayuda francesa y de poderosos lobbies norteamericanos. Saudi Arabia sabe que, armándose nuclearmente y con las bolsas de petróleo que posee, tendrá la supremacía regional y como primer suministrador de petróleo mundial sabe que en el futuro estaría en condiciones de mirar de otro modo a Israel, principal enemigo reconocido, a pesar de EE.UU. -que le tocaría más adelante. Una futura Saudi Arabia nuclear luchando actualmente con todos sus medios para que Iran no lo sea aunque tenga que implicar a toda la Comunidad Internacional con EE.UU., Israel y Europa a la cabeza.

Lo que sí ya han conseguido los saudíes es que Libya se haya desangrado, que Syria se desangre, que las grandes familias egipcias vuelvan a ser quienes fueron, que las trifulcas entre sunníes y shiíes en Iraq no cesen y, gracias a su propaganda audiovisual, contar con el apoyo de la gran mayoría de organizaciones terroristas islamistas desde Marruecos hasta Afganistan, se llamen como se llamen, que son las que garantizan el verdadero Islam sunní y que aseguran que lo mejor de esta vida empieza siempre con Bismillah. Que se lo pregunten a los familiares de los ejecutados o decapitados en Syria.

Soy musulmán sunní, sí, pero el tener ojos para leer, oídos para escuchar y cerebro para comprender me hace estar a años luz de estos que dicen que no hay otro camino más que el Qur'an y la Sunnah; entretenidos en la religión y que no pensarán, no discutirán y no juzgarán lo que se está comentiendo en nombre de la religión porque no tienen tiempo de desviarse. Una legión de tragapalabras que no son capaces de asumir lo que realmente son: idiotas que estudian y temen mucho y aman poco, o muy poco.




miércoles, 6 de noviembre de 2013

Esperando a Milady.

Europa se ofrece de nuevo como mediador en Egipto. No me interesa. EE.UU., después de ver cómo los egipcios no solo han estado en Emiratos sino que también se han dado un paseo por Moscú quedando encantados ambos, llega con su delegación a Cairo ofreciendo su apoyo al Gobierno Interino y diciendo que por un quítame allá esas pajas no vamos a dejar de colaborar -aunque las pajas fueran la congelación de la ayuda monetaria y armamentística firmada en Camp David y el temor de perder la exclusividad de paso de sus buques por el Canal de Suez. Tampoco me interesa a menos que John Kerry rebaje el precio del ketchup Heinz, que para eso su mujer es la dueña de la empresa y en Egipto venden como churros el 57 variedades. Que hayan prohibido la salida a un miembro del Partido Libertad y Justicia y le hayan detenido en el aeropuerto internacional de Cairo, tal y como están las cosas, ni me sorprende lo más mínimo ni tampoco me interesa. Incluso ni me importa demasiado la jaimitada del doctor Mohamed Mohamed Morsi en la Academia de Policía; para él la perra gorda de ser el Presidente legítimo de Egipto pero ojalá el juez Idris le acabe explicando al doctor, por si no le habían informado Badie o al-Shater, sobre el pucherazo de las elecciones democráticas. Ni siquiera el enfado en los despachos egipcios después de oir que los gobernantes turcos, Hermanos Musulmanes al fin y al cabo, piden la restitución de M.M. Morsi me importa.

Lo que sí me interesa, y mucho, es ver lo poco va a cambiar Egipto con la nueva Constitución por mucho que Amr Moussa abogue por el debate público de la misma en los medios de comunicación. Tal y como ha dicho delante de medios internacionales el artículo 2, que dice que los principios de la Sharia son entendidos como fuente de derecho, va a ser intocable por consenso mayoritario. Mala pinta entonces porque ya se estaría discriminando a los millones y millones de cristianos coptos que viven y profesan en Egipto y que se la tragarán doblada por mucho que ahora adúlen al ejército arguyendo que les han liberado de los HHMM y del Islam político en el poder y muchos de ellos simplifiquen las manifestaciones del pasado 30-J como Golpe de Estado (bienvenido sea dicen algunos) porque, quieran o no, será una Ley que les someterá injustamente. Delante de los mismos medios dice Amr Moussa, sin ruborizarse, que el General al-Sisi cuenta con un amplio apoyo ciudadano en una posible candidatura presidencial y que este hecho ha de ser tenido en cuenta (lagarto, lagarto). Para remate habla de que la Constitución egipcia está ideada para tener una vigencia de al menos 50 años.

Después de todo lo ocurrido en Egipto, de la desastrosa situación económica, política y social, después del derrocamiento de M.M. Morsi el General al-Sisi tiene más popularidad en Egipto que en España Belén Estéban -del primero hay tartas y bombones con su cara, respecto a la segunda, gracias al altísimo o al sursum corda, aún no hemos caído tan bajo. Realmente lo que ha hecho al-Sisi con Egipto es lo que hizo en España Franco con los pantanos; inagurarlos porque si no hubiera sido él hubiera sido el que hubiera ocupado su puesto pero por el mero hecho de ser el Ministro de Defensa en Egipto -y oyendo a la ciudadanía ante las "excepcionales e históricas movilizaciones" contra el régimen de Morsi; o lo que es lo mismo obrando como le ampara la Ley en caso de Seguridad Nacional- el General al-Sisi, menos para el islamismo político, es una figura cuasi de adoración para un enorme número de ciudadanos; al-Sisi o el ejército que, al fin y al cabo, es lo mismo. Egipcios devotos de su historia, pasada y reciente, aunque hayan sido sodomizados por la misma, que también.

Me preocupa que de nuevo Egipto estará en un escenario dirigido; tal vez con una cierta apertura pero ni libre ni democrático aunque así lo vendan. Condicionado de nuevo el pueblo volverá a las urnas contra unos o contra otros porque al final, tan polarizada sigue la escena, ni siquiera los movimientos juveniles -el verdadero futuro- podrán abrirse paso por mucho y bien que se expliquen. Si de algo vale, para ellos irá mi apoyo.

Y me preocupa, y mucho, que dentro de la comisión constitucional el partido al-Nour -dudoso honor el que me llame igual que ellos, aunque los prefiero a los hermanos porque al menos van de cara- se niegue a añadir en la Constitución un artículo, el 11, que reconozca la igualdad de género; no solo en lo referente a cuotas, sino a lo referente a todo lo que abarca el intocable artículo 2: los principios de la Sharia. Por higiene -incluso política- sería deseable que la mujer tenga voz y responsabilidades en el próximo Egipto. Soy poco soñador pero, si hubiera un mínimo de cordura, deseo y espero ver a las mujeres en puestos mucho más representativos. Barbudos de al-Nour!, las mujeres no son floreros, aunque os cueste creerlo.


sábado, 2 de noviembre de 2013

El Bernameg.

"Lo mejor que le puede pasar a un cruasán es que lo unten con mantequilla". No se porqué nada más saber que la cadena CBC ha suspendido la emisión del programa El Bernameg, de Bassem Youssef, se me he venido a la mente la primera frase del libro de Pablo Tusset. Tal vez haya sido porque la mantequilla resbala y eso creo que ha hecho la CBC, resbalarse, vetando el programa franquicia del presentador del presentador estrella.

Bassem Youssef es un presentador de un programa de humor, ácido e inteligente que mientras han estado Morsi y los Hermanos Musulmanes al frente del Gobierno egipcio ha criticado sistemáticamente las torpezas, los errores y hasta los aspavientos del anterior régimen, de sus seguidores, de los medios de comunicación que los alentaban y todo ello corriendo peligro su integridad por la acumulación de amenazas a su persona. Bassem Youssef era una cara simpática para los detractores de los islamistas, para los militares, y sus seguidores eran legión.

Doctor Bassem Youssef
Desde poco después del derrocamiento de Morsi hasta el pasado viernes 25 de octubre Bassem Youssef no ha emitido ningún programa pero al doctor en cirugía vascular se le ha visto, con y sin micrófono, en las manifestaciones anti-Morsi diciendo, al que quisiera oirle, verdades como puños respecto al zafio comportamiento de los islamistas y opinando acerca de lo que cree que debería ser su país; un tipo comprometido con su pueblo pudiendo, debido a su popularidad, haberse quedado en casa y con una cámara delante decir exactamente lo mismo que en la calle.

Durante semanas y semanas se ha echado de menos su programa a las 21:30 del viernes hasta que el pasado 25 volvía a la parrilla El Bernameg. Las críticas han sido terribles contra él porque ha hecho exactamente lo mismo que hacía con Morsi y los Hermanos Musulmanes pero ahora con el ejército, incluso con un tono muchísimo más moderado. Antes se sentían dañados por el presentador los seguidores islamistas y se ganaba la risa, el aplauso y el favor de más de medio Egipto (sus programas solo en el canal Youtube han sido seguidos por más de 30 millones de egipcios) y ahora, después de dudar si BY haría el mismo tipo de programa, incluso amenazando con denunciar en el caso de no hacerlo, parece que son los que ríen.

Desde CBC se ha dicho que tras el visionado del segundo programa de la temporada éste contravenía la "política editorial de la cadena" al tiempo que filtra un desencuentro económico entre las dos partes. Qué problema económico puede tener una empresa privada con su presentador estrella si es el que más dinero genera para la empresa?. Evidentemente el contrato que tengan entre ellos lo desconozco pero sería bueno que, cuanto antes, tanto el presentador como la cadena den explicaciones al respecto porque da sensación de conchaveo de la CBC con el gobierno interino, o con el ejército, y ante los islamistas que se están concentrando y lo harán -mínimo- hasta el próximo día 4, día del juicio fijado a Morsi y a otros 14 miembros de los HHMM, este veto a Bassem Youssef es una pequeña victoria porque es interpretado como una justificación más del Golpe de Estado ya que ellos sufrieron ese tono irónico del presentador y ni con amenazas ni con la justicia pudieron cancelar la emisión del programa pues tanto la cadena como la opinión pública respaldaban a BY. Ahora en esta nueva etapa política, y en esta nueva temporada televisiva, después del primer programa alguien entiende que hay motivos para cancelar, al menos, el segundo el viernes a última hora cuando por todos es sabido que El Bernameg se graba los miércoles. Este asunto huele que apesta.

PD: Ayer viernes se filtró que la comisión encargada de redactar la nueva Constitución egipcia es favorable a la eleminación de la censura en los medios de comunicación; censura que seguirá aplicándose en caso que afecte a temas de seguridad nacional.